En la era digital, una web es a menudo el primer punto de contacto entre una empresa y sus clientes. Es una poderosa herramienta de comunicación, marketing y ventas. Sin embargo, como cualquier otra herramienta, con el tiempo puede quedar anticuada o volverse ineficaz. He aquí algunas señales clave que indican que ha llegado el momento de plantearse un rediseño web.
Diseño anticuado
El diseño de nuestra página refleja la imagen de nuestra marca. Un diseño anticuado puede hacer que nuestra empresa parezca anticuada o poco profesional. Las tendencias de diseño moderno cambian con frecuencia, y una web que parecía vanguardista hace cinco años puede parecer anticuada ahora. Los usuarios esperan páginas web limpias, modernas y visualmente atractivas. Si nuestra web parece de otra época, es hora de renovarla.
Pobre experiencia del usuario
Cuando la gente no puede encontrar lo que busca o moverse por nuestra página, la abandonará rápidamente. Tener un diseño claro y fácil de usar es clave para mantener el interés de los visitantes. Observar los datos de nuestra web puede decirnos mucho sobre cómo la utiliza la gente. Si nuestra página tiene una tasa de rebote alta (es decir, la gente la abandona después de ver sólo una página), puede significar que nuestra web no está dando a los visitantes la información o la experiencia que desean.
Tiempos de carga lentos
Los usuarios en Internet son muy impacientes. Si nuestra web tarda más de unos segundos en cargarse, los visitantes pueden abandonarla y buscar otra web que se abra más rápido. La velocidad de la página también es un factor en la clasificación de los motores de búsqueda. Una web lenta puede afectar negativamente a nuestros esfuerzos de SEO, haciendo más difícil que nuestros clientes potenciales descubran nuestro negocio mientras navegan por Internet.
No es compatible con dispositivos móviles
En la era digital actual, la mayoría de las personas navegan por Internet utilizando sus teléfonos o tabletas, lo que hace que un diseño compatible con dispositivos móviles sea esencial en lugar de opcional. Si nuestra web no se adapta perfectamente a los distintos tamaños de pantalla, es probable que estemos perdiendo una parte importante de nuestra audiencia. Navegar por una web que no responde en un dispositivo móvil puede ser engorroso, frustrar a los usuarios y alejar a los clientes potenciales.
Bajos índices de conversión
Si nuestra página no está generando clientes potenciales, ventas o cualesquiera que sean nuestros objetivos principales, puede que sea el momento de evaluarla y rediseñarla. Unas tasas de conversión bajas pueden ser una señal de que el diseño, el contenido o el flujo de usuarios de nuestra página no están impulsando la acción de forma eficaz. Los CTA eficaces son cruciales para las conversiones. Si los CTA están ocultos, son poco claros o poco atractivos, un rediseño puede ayudar a hacerlas más prominentes y eficaces.
Difícil de actualizar
Las páginas modernas deberían ser fáciles de actualizar sin necesidad de grandes conocimientos técnicos. Si nos resulta difícil añadir o actualizar contenidos, es hora de plantearse un rediseño con un sistema de gestión de contenidos (CMS) más fácil de usar. Una página eficaz necesita contenidos actualizados con regularidad para seguir siendo relevante y atraer a los visitantes. La dificultad para actualizar los contenidos puede dar lugar a una web estancada, lo que puede ahuyentar a los visitantes.
Evolución de la marca
Cuando nuestra empresa se somete a un cambio de imagen de marca, nuestra página debe mostrar el nuevo aspecto. Esto significa poner logotipos nuevos, cambiar los colores y modificar el mensaje. A medida que nuestra empresa crece y cambia, nuestra web debe estar a la altura de nuestros objetivos actuales. Dar un lavado de cara a nuestra marca y a nuestra página puede ayudarnos a mostrar los nuevos productos que vendemos, los servicios que ofrecemos o a atraer a las personas a las que queremos llegar.
Seguridad web
Las páginas web antiguas pueden funcionar con plataformas obsoletas que son más vulnerables a las brechas de seguridad. Debemos asegurarnos de que nuestra web está construida con tecnología actualizada y segura ya que es crucial para proteger nuestro negocio y a nuestros clientes. Las páginas web modernas deben utilizar https:// para garantizar conexiones seguras. Si nuestra sigue funcionando con http://, es hora de actualizarla y rediseñarla para mejorar la seguridad.
Bajo rendimiento SEO
Si nuestra web no aparece en los resultados de búsqueda como debería, podría deberse a prácticas de SEO obsoletas. Un rediseño puede ayudar a implementar las últimas estrategias SEO para mejorar la visibilidad. Un SEO eficaz depende de un contenido bien estructurado. Un rediseño puede ayudar a organizar mejor nuestro contenido, haciéndolo más accesible tanto para los motores de búsqueda como para los usuarios.
Una web bien diseñada es crucial para el éxito empresarial en la era digital. Reconocer las señales que indican que ha llegado el momento de un rediseño puede ayudarnos a seguir siendo competitivo, mejorar la experiencia del usuario y alcanzar nuestros objetivos empresariales.
Arreglando los diseños anticuados, mejorando la experiencia del usuario, acelerando la carga de las páginas, adaptándolo para que funcione bien en los teléfonos, aumentando las ventas, facilitando las actualizaciones, refrescando el aspecto de nuestra marca, reforzando la seguridad y ayudando a que nuestra aparezca en las búsquedas, podemos hacer que nuestra web siga trabajando duro para nuestra empresa. Si observas alguno de estos problemas en tu web, puede que haya llegado el momento de pensar en renovarla.
