La necesidad de elaborar contenidos orientados a las personas, que destaquen por ser útiles y fiables nunca ha sido tan crucial. Dado que Google es el principal medio por el que los usuarios acceden a la información en Internet, ha modificado sus sistemas de clasificación automatizados para dar más importancia a los contenidos que satisfacen las necesidades de los usuarios en lugar de a los contenidos que intentan subir puestos en las clasificaciones de los motores de búsqueda.
El primer paso en la optimización que debemos hacer de nuestro contenido es una autoevaluación exhaustiva. Más allá de la introspección, es importante buscar evaluaciones externas de personas ajenas, alguien que conozca bien el tema sobre el que está escribiendo. También es útil realizar auditorías periódicas de páginas de contenido que ha bajado en las clasificaciones para encontrar lugares en los que se puede mejorar.
Por lo tanto, vamos a realizar una lista de comprobación que nos guiará en la elaboración de contenidos que no sólo se ajusten a las normas de Google, sino que también conecten con nuestra audiencia. Cada pregunta tiene como objetivo garantizar que nuestro material también cumpla los criterios de los algoritmos de los motores de búsqueda. Vamos a desglosar estas preguntas:
- Originalidad: Empecemos destacando la importancia de la originalidad. ¿Nuestro contenido nace de una información, un reportaje, una investigación o un análisis únicos? Para que nuestro contenido destaque en un mundo lleno de desinformación, necesitamos crear credibilidad.
- Exhaustividad: Debemos valorar a la necesidad de información en profundidad de nuestros usuarios; es importante evaluar si nuestro contenido ofrece una descripción sustancial, completa o exhaustiva del tema sobre el que escribimos. Los usuarios buscan cada vez más información exhaustiva para satisfacer sus necesidades informativas.
- Perspicacia: ¿Nuestro contenido va más allá de lo obvio? ¿Ofrecemos un análisis profundo o información interesante? Destacamos la importancia de la profundidad y la riqueza de los contenidos porque aumentan la participación de los usuarios al ofrecerles información valiosa y hacer que permanezcan más tiempo en nuestra web.
- Valor añadido: Si nuestro contenido se basa en fuentes externas, ¿va más allá de la mera réplica y aporta valor añadido y originalidad? Los usuarios esperan algo más que información regurgitada; buscan perspectivas enriquecidas que contribuyan a su conocimiento.
- Descriptividad: ¿Proporciona nuestro contenido una descripción sustancial del tema? Los lectores de hoy buscan información en profundidad, y la exhaustividad es la clave para satisfacer sus expectativas. Al fin y al cabo, la claridad ayuda tanto a los usuarios como a los motores de búsqueda a comprender la esencia de nuestro contenido.
- Evitar la exageración: La honestidad es crucial en la creación de contenidos. ¿Estamos evitando en el encabezamiento principal o el título de la página la exageración o el clickbait? Esto fomenta la confianza y la credibilidad de nuestros lectores, garantizando que nuestro público reciba información transparente y fiable.
- Compartibilidad: ¿Es nuestro contenido algo que nuestros lectores querrían marcar, compartir o recomendar a su círculo? Debemos evaluar la viralidad potencial de nuestro contenido, porque la compartibilidad significa satisfacción del usuario y relevancia, contribuyendo al impacto más amplio del contenido en la web.
- Valor comparativo: Pensemos, ¿nuestro contenido proporciona un valor sustancial en comparación con otras páginas en los resultados de búsqueda? El usuario debería percibir nuestro contenido escrito como más valioso que las alternativas, lo que fomentaría un compromiso sostenido.
- Controles de calidad: La atención al detalle importa. ¿Hemos sometido nuestro contenido a comprobaciones de calidad para detectar problemas gramaticales o de formato? Un contenido pulido y organizado refleja nuestra profesionalidad y mejora la experiencia general del usuario.
El objetivo no es adaptarse a los algoritmos de los motores de búsqueda, sino ofrecer una experiencia realmente valiosa y atractiva a nuestro público.
Preguntas especializadas
Ahora, exploremos los aspectos de la experiencia que contribuyen a la fiabilidad y credibilidad de nuestro contenido. Desglosemos cada punto para comprender mejor su importancia:
- Fiabilidad: ¿Nuestro contenido genera confianza a través de fuentes claras y pruebas de experiencia? La confianza es un factor fundamental en el compromiso de los usuarios. Es importante citar de forma transparente las fuentes, proporcionar referencias y demostrar conocimientos especializados para generar confianza en la audiencia. Por ejemplo, si escribimos un artículo relacionado con la salud, debemos citar los estudios a los que hacemos referencia, los profesionales médicos, los trabajos de investigación o cualquier fuente autorizada de la que hayamos obtenido la información. De este modo, nuestra audiencia podrá confiar en nuestro contenido.
- Reputación de la web: ¿Nuestra página web transmite confianza y autoridad a nuestros lectores? Una sólida reputación de la página web es un elemento esencial en la evaluación de contenidos. Por lo general, los lectores pueden saber hasta qué punto nuestro contenido es digno de confianza con sólo echar un vistazo a nuestra web. Nuestra reputación, diseño y funcionalidad contribuyen a que nuestro público perciba la fiabilidad de nuestros contenidos. Construir una buena página web da buena reputación.
- Experiencia del autor: ¿Nuestro contenido está escrito o revisado por un experto o un entusiasta que conoce bien el tema? La experiencia del creador de contenidos contribuye significativamente a la calidad general del contenido. Es más probable que los lectores crean la información que proviene de personas con conocimientos o experiencia reales en un campo concreto. La opinión de un experto profesional en tecnología, por ejemplo, es más creíble que un resumen.
- Exactitud de los hechos: ¿Nuestro contenido contiene errores fácilmente verificables? La exactitud es esencial para mantener la confianza de los usuarios. Los errores fácticos pueden erosionar la credibilidad del contenido que hemos creado y dañar nuestra reputación. Es crucial asegurarnos de que la información es precisa, está actualizada y es verificable. Por ejemplo, si nuestro contenido incluye estadísticas o hechos históricos y fechas, debemos comprobarlo dos veces y proporcionar fuentes acreditadas para mejorar la exactitud factual de nuestro contenido.
Al abordar estas cuestiones relacionadas con la experiencia, podemos establecer una base de credibilidad y confianza con nuestra audiencia.
Esto es importante para la participación de los usuarios y también se ajusta a los criterios de Google para evaluar la calidad del contenido. Cuando nuestros lectores confían en nuestro contenido, es más probable que lo utilicen, lo compartan y consideren nuestra página web como una fuente de información fiable.
Además de la calidad del contenido, los principales sistemas de clasificación de Google dan prioridad a una experiencia de página positiva. Esto incluye factores como la velocidad de carga de la página, la compatibilidad con dispositivos móviles y la satisfacción general del usuario (es decir, la tasa de rebote).
Entonces, ¿qué debemos hacer? En primer lugar, podemos empezar por adoptar un enfoque centrado en las personas, en el que el contenido esté al servicio de nuestra audiencia y no únicamente en la clasificación en los motores de búsqueda.
Evita crear contenidos orientados a los motores de búsqueda
Centrarse en crear contenido principalmente para los motores de búsqueda, en lugar de para nuestros lectores, tendrá un impacto negativo en el rendimiento de nuestra web. Estas son las señales de advertencia que debemos tener en cuenta:
- Atracción de los motores de búsqueda: La cuestión fundamental aquí es si nuestro contenido está diseñado principalmente para atraer visitas de los motores de búsqueda. Esto advierte de las posibles trampas de crear contenidos únicamente para cumplir requisitos algorítmicos en lugar de servir a las necesidades genuinas de nuestra audiencia.
- Sobrecarga de contenidos: ¿Estás bombardeando tu web con contenidos excesivos sobre multitud de temas con la esperanza de obtener mejores resultados en las búsquedas? Error. Es fundamental reconsiderar el equilibrio entre calidad y cantidad. Nuestro contenido debe centrarse en el usuario.
- Uso excesivo de la automatización: Nuestros lectores se dan cuenta cuando algo está escrito por IA. No suena natural ni parece original. Si dependemos en gran medida de la IA para escribir contenido por nosotros, su uso excesivo comprometerá la autenticidad y profundidad de nuestro contenido, disminuyendo su valor para nuestra audiencia.
- Falta de valor añadido: ¿Te limitas a resumir el contenido de otros sin añadir un valor significativo? La creación de contenidos debe ir más allá de resumir información existente; debe ser original y contribuir al conocimiento de nuestros lectores.
- Perseguir tendencias: ¿Estás persiguiendo tendencias sin tener en cuenta las preferencias de tus lectores? Escribir sobre trending topics puede ser beneficioso, pero no si no tiene en cuenta los intereses de nuestra audiencia actual. No deberíamos escribir sobre un meme de gatos que es tendencia con el propósito de conseguir clics si tenemos una publicación sobre negocios. Así que equilibra el contenido que es relevante y trending para mantener a nuestra audiencia comprometida.
- Insatisfacción del usuario: ¿Nuestro contenido deja a los lectores insatisfechos, incitándoles a marcharse y buscar de nuevo mejor información en otro sitio? Reconocer la insatisfacción de nuestros lectores como una señal de alarma pone de relieve la importancia de ofrecer contenidos valiosos y completos. Por lo tanto, debemos hacer una pequeña reevaluación, examinar el rendimiento de nuestra web y buscar formas de mejorar.
- Enfoque en el recuento de palabras: ¿Estamos escribiendo según un recuento de palabras específico basado en ideas erróneas sobre las preferencias de Google? Esta pregunta cuestiona la idea de que el contenido más largo siempre es mejor y rinde más en los motores de búsqueda de Google, pero eso no es cierto; debemos mantenernos relevantes; no escribamos 3.000 palabras sobre un tema que es fácil de entender con el fin de alcanzar un recuento de palabras específico.
- Nicho sin experiencia: Este es un gran problema. ¿Hemos elegido un nicho sin poseer verdadera experiencia? Entrar en un nicho sin una comprensión y conocimiento genuinos del mismo -sólo por el potencial tráfico de búsqueda- es una trampa común. Como creadores de contenido, debemos alinear nuestro contenido con nuestro conocimiento y competencia genuinos.
- Falsas promesas: ¿Nuestro contenido hace promesas de responder a preguntas que no tienen respuestas confirmadas? Es cierto que esto incita a nuestros lectores a hacer clic en nuestro artículo, pero su naturaleza engañosa induce a error a nuestra audiencia y provocará desconfianza.
- Tácticas manipuladoras: ¿Estamos cambiando las fechas de las páginas para crear una falsa sensación de frescura? Puede que no lo sepas, pero estas tácticas manipuladoras pueden ser percibidas como un intento de engañar a tus lectores y los motores de búsqueda se darán cuenta.
Al reconocer y abordar estas señales de advertencia, podemos alejarnos del contenido centrado en los motores de búsqueda y volver a centrar nuestros esfuerzos en la creación de material valioso y centrado en el usuario que fomente el compromiso genuino y la confianza con nuestra audiencia.
Aunque el SEO es fundamental para mejorar la visibilidad de los contenidos, debemos focalizarnos en los contenidos centrados en las personas y no en los motores de búsqueda.
Aprender la E-A-T y los principios del evaluador de calidad
La experiencia, la autoridad y la fiabilidad (E-A-T) son esenciales para que los creadores de contenido cumplamos los estándares de contenido de alta calidad de Google. Aunque la E-A-T en sí no es un factor de clasificación directo, su cumplimiento influye en el modo en que los algoritmos de Google evalúan y clasifican nuestro contenido. Además, conocer las directrices del evaluador de calidad proporciona información útil sobre los criterios precisos que utilizan los sistemas automatizados de Google para evaluar el material.
Experiencia
Se refiere a la experiencia y a los conocimientos de primera mano demostrados en nuestro contenido. Por ejemplo, si escribimos sobre una enfermedad, E-A-T da más importancia al contenido escrito por un médico o por alguien que haya tenido experiencia directa con la enfermedad.
Autoridad
La autoridad se refiere a la credibilidad e influencia del creador del contenido o de la web. Es probable que un autor con una trayectoria reconocida en un campo específico se considere autorizado. Por ejemplo, un artículo sobre el cambio climático escrito por un científico medioambiental de renombre tiene más autoridad.
Fiabilidad
La fiabilidad consiste en generar confianza en el público. Proporcionar información precisa, citar fuentes fiables y mantener un enfoque transparente y honesto contribuyen a la fiabilidad de nuestro contenido.
Es importante señalar que Google emplea calificadores de calidad humanos para evaluar y perfeccionar sus algoritmos. Estos calificadores siguen una serie de directrices para evaluar la calidad de los resultados de búsqueda. Si conocemos estas directrices, podremos comprender mejor los aspectos que valora Google a la hora de determinar la relevancia y la fiabilidad del contenido.
Si seguimos estas directrices, aumentaremos la probabilidad de que los algoritmos de Google consideren nuestro contenido de forma favorable. La elaboración de contenidos útiles, fiables y orientados a las personas no es sólo una estrategia de clasificación en Google, sino también un compromiso para proporcionar valor a nuestro lectores. A través de una autoevaluación exhaustiva, la adhesión a los principios «people-first» y la evitación de errores comunes, nuestro contenido puede destacar positivamente.
El objetivo final no es simplemente apaciguar a los algoritmos de los motores de búsqueda, sino crear una experiencia significativa y satisfactoria para nuestros lectores.
